Sólo encontrarán verdadera alegría en la alegría que aportan a los demás. Por eso les invito a participar en esta vida magnífica que queremos crear aquí. Vean a nuestros hermanos y hermanas que trabajan en la cocina: son felices porque nos preparan cada día suculentas comidas; nos dan ejemplo. Pero cada uno de ustedes puede encontrar también algo que hacer en los cultivos de hortalizas y flores, en el arreglo y mantenimiento de los edificios, la limpieza de las avenidas y caminos. Hay trabajo en todas partes y para todo el mundo. Lo que hacen así por los demás, pues aquí viven en una colectividad, lo hacen también por ustedes. En el alma humana se produce una gran revolución el día en que se interesa por lo que también es útil y benéfico para los demás.

Cuanto más trabajen ustedes por una colectividad mayor será su grandeza. Nadie podrá disminuir el valor de lo que hacen. Estén donde estén, al trabajar por la colectividad, se convierten en un colaborador de Dios mismo.

Deben pues comprender que el trabajo físico es indispensable para la evolución de cada cual. Incluso si nadie les obliga a ello, se deben obligar a sí mismos, si no se reflejará de forma muy nociva sobre su salud, en el sistema muscular, en la sangre …Con el pretexto de sentirse bien no se hace ningún esfuerzo, pero es este bienestar ilusorio, precisamente, el que induce a error a toda la humanidad. Si sólo supieran la utilidad de la actividad física para la salud e incluso para la iluminación de la consciencia, harían todo lo posible, incluso cuando están solos en sus casas, por tener algo que limpiar, lavar, ordenar. El plano material es un taller de trabajo en el que nos ejercitamos para ser capaces de llevar a cabo un trabajo espiritual.

Las transformaciones del movimiento en calor y en luz (y de la luz en calor y en movimiento) son particularmente conocidas y explicadas en Física. Sólo los espiritualistas perezosos no las conocen y se contentan con meditar, reflexionar, hablar, sin que nada de estas actividades se transforme en sentimientos o en actos.